Esta semana llega el verano, cambiamos de estación para disfrutar de largos días soleados y de una gran variedad de deliciosos alimentos. Uno de estos tesoros culinarios, propios de la temporada de verano y muy apreciado en Galicia en estas fechas, es la sardina (Sardina pilchardus). Este estupendo pescado azul es propio de las noches de San Juan, una tradición en la cual en el litoral gallego se asan sardinas y se disfruta de las hogueras en una noche mágica.
La sardina (Sardina pilchardus) es uno de los pescados azules por antonomasia cuyo momento óptimo de consumo es el verano, ya que es cuando alcanzan su máximo de abundancia y calidad. Esto es debido a que en estas fechas, tras un año alimentándose, acumulan una mayor cantidad de grasa (Omega – 3) y se acercan a la costa para su reproducción.
La sardina es un pescado pelágico, pues vive en la columna de agua a profundidades de hasta 150 m, aunque lo más habitual es encontrarlas a 15 – 30 m de profundidad. Realizan migraciones verticales diarias por lo que durante el día se encuentran a 25-50 m y, por la noche entre los 15-30 m, siendo el mejor momento para su captura. Los barcos de cerco aprovechan la noche y la coloración de la sardina para distinguir los cardúmenes por su efecto lumínico. La flota de ACERGA realiza su captura por todo el litoral gallego (Atlántico Noroeste) y la costa cantábrica (Cantábrico Noroeste).
(Saber más: museo do cerco)
La denominada “xouba” en las Rías Baixas y “parrocha” en las Rías Altas, puede alcanzar los 25 cm de longitud, aunque la común está entre los 15 y 20 cm, siendo su talla mínima de consumo y comercialización de 11 cm.
Valor Nutricional de las Sardinas
Este pescado azul no solo es muy sabroso, sino que también tienen un valor nutricional impresionante. Las sardinas están repletas de vitaminas y minerales esenciales para una dieta equilibrada y son también una excelente fuente de proteínas de alta calidad, fundamentales para la construcción y reparación de tejidos en nuestro cuerpo.
Son ricas en ácidos grasos omega-3, conocidos por sus beneficios para la salud cardiovascular ya que ayudan a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre. Además, las sardinas son una fuente de calcio, vitamina D y fósforo, nutrientes esenciales para mantener huesos fuertes y sanos.
Sardinas asadas para dar la bienvenida al verano
En Galicia, el consumo de sardina alcanza su punto máximo durante los meses de verano debido a la tradición de San Juan, una festividad muy arraigada en la cultura gallega. Cada año, en la noche del 23 de junio, las playas de Galicia se llenan de hogueras y gente celebrando la llegada del solsticio de verano donde las sardinas, preparadas tradicionalmente a la parrilla, tienen un papel destacado.
La sencillez de esta preparación permite que los sabores naturales de las sardinas destaquen, dejando su piel crujiente y su carne tierna y jugosa. Como bien dice el refrán: “Polo San Xoán, a sardiña molla o pan”, así que solo falta una buena rodaja de pan artesano para aprovechar todo su jugo y disfrutarlas al aire libre, creando una experiencia gastronómica inolvidable.
Las sardinas son una fuente de nutrición incomparable pero además, en Galicia, su consumo durante los meses de verano se ha convertido en una tradición que une a familias y amigos en torno a la gastronomía, la alegría y la celebración.